miércoles, 28 de octubre de 2009

Mari Jungstedt: Ingredientes básicos para una buena novela policiaca


La semana pasada Madrid se vistió de oscuridad y misterio para celebrar la segunda edición del festival de novela policiaca 'Getafe negro'. Aprovechando la intriga y el suspense de este género literario,  la escritora Mari Jungstedt, que visitó dicho festival para presentar su último libro 'Nadie lo ha oído', y revelò los secretos de la novela negra.

Nos ponemos en situación. Una atmósfera asfixiante donde reina el miedo, la violencia, la inseguridad. Personajes derrotados y maltrechos que buscan encontrar la verdad entre las sombras. La intriga de algún crimen con muchas incógnitas y ninguna respuesta. Un mundo en el que el lector se sumerge desde la primera página y del que no puede salir hasta que llega a la última.

Entonces Mari Jungstedt entra en escena. De la mano de su última novela nos introduce en su visión particular de este género literario que está pegando fuerte en todo el mundo y, en particular, en su país de origen. "En Suecia también vivimos un boom de la novela negra. Tenemos una tradición muy fuerte desde los años sesenta. El género es mucho más amplio ahora", explica.

Su novela 'Nadie lo ha oído' une a personajes de diferentes edades y condiciones sociales que recorren su propio camino. Un cúmulo de historias que se entrecruzan y que confluyen entre ellas. El punto de partida es el asesinato del fotógrafo alcohólico Henry Dahltröm en la ciudad sueca de Gotland y, de la mano del comisario Anders Knutas, el lector se sumergirá en la investigación de unos crímenes que darán mucho que hablar.

Fiel al estilo clásico de cualquier novela negra, la tensión narrativa permanece hasta la última página, aunque Jungstedt la genera de un modo particular, a través de breves capítulos que corresponden a los días que van pasando en la vida de los personajes.

"Yo trabajo mucho con el dramatismo porque quiero mantener el interés del lector para que siga teniendo ganas de leer, por eso trabajo con los capítulos cortos, porque creo que es una manera de contar la historia que me gusta", nos explica la escritora. "Además, trabajo mucho con la presencia, ya que para mí es muy importante que el lector se sienta presente en los libros", añade.


 Ingredientes básicos para una buena novela policiaca

Una novela negra tiene que tener una intriga creíble y, sobre todo, tiene que ser absorbente para atraer al lector. Esa es la principal regla para Mari Jungstedt, que nos explica que la literatura policiaca tiene que enganchar desde la primera página hasta la última, por lo que "aquellas novelas que no son absorbentes no funcionan".

Los personajes son el segundo filón para el éxito literario. "Algo muy importante es que las novelas tienen que tener personajes que me importen, que esté enganchada a lo que les pasa", nos explica la escritora. "Además, para mí es muy importante la psicología en los libros, el porqué pasa esto, y cómo podemos explicar que una persona pueda hacer cosas tan terribles como llegar a asesinar a otra", añadió.

Por último, para Jungstedt "también es muy bueno que el libro tenga un sentido más profundo", que consiga dejarte algo más que una historia una vez que lo acabes y lo cierres. Un valor añadido que esté más allá de las palabras que se juntan página tras página.

 Mari Jungstedt se suma al éxito de la novela negra escandinava
 

Nunca pensó que iba a tener éxito como escritora, pero Mari Jungstedt se ha sumado a los referentes que aúnan crimen y crítica social en la novela policíaca escandinava con "Nadie lo ha visto", que se publica ahora en España y otros países tras haber vendido 850.000 ejemplares en Suecia.

Después de diez años de carrera periodística en la televisión sueca, Jungstedt decidió ponerse a escribir "como un intento, sin pensar que llegaría a leerse el libro, y mucho menos en otros países", ha dicho hoy a Efe.

Ahora cuenta ya con seis libros publicados en Suecia que han cautivado a los lectores con tramas perfectamente hiladas, que se resuelven sin dejar nada al azar. "Es importante -apunta- no desvelar demasiado, pero también que el asesino no caiga del cielo como una sorpresa".

"Nadie lo ha visto" (Maeva) es la primera novela protagonizada por el comisario Anders Knutas y el periodista Johan Berg, ubicada en la isla de Gotland -donde la autora tiene una residencia- "que es perfecta para la trama, porque crea un ambiente cerrado, muy especial, y está rodeada de mar", explica Jungstedt.

Esta idílica isla turística da un giro cuando Helena es asesinada, después de una fiesta de amigos que termina en un ataque de celos de Per, su novio. Aunque el primer sospechoso es Per, Jungstedt introduce al lector en la mente de todos sus personajes y, así, hace dudar al lector en cada página, igual que a los propios encargados de la investigación.

Mari Jungstedt confiesa que, más que de Larsson, "que es un fenómeno muy reciente", ha bebido de Maj Sjövall y Per Wahlöo, que en los años sesenta iniciaron la corriente de la novela negra escandinava, cuyo éxito atribuye a que "todo el mundo se puede identificar con estos problemas".

Pero la autora (Estocolmo, 1962) tiene mucho en común con los autores del género, como el propio Larsson, Indridason o Henning Mankell, del que se declara fiel seguidora. Asegura que, en sus novelas, además de crimen "hay una historia mucho más profunda, sobre la infancia y sobre cómo las cosas que ocurren en la infancia nos afectan en la vida".

La fragilidad de los niños

Además de mostrarse crítica con "una realidad" como el acoso escolar -del que fue víctima de niña- pretende ir más allá, hablar de la fragilidad de los niños y de "lo importante que es que tengan a alguien adulto para hablar".

Aunque Jungstedt no da nombre al asesino hasta las últimas páginas, introduce, desde el principio, un monólogo interior del personaje cuando era niño, "no para justificar, sino para entender su actitud". "Esa voz muchas veces es mi propia voz, las memorias que yo tengo de cuando estuve en la escuela", afirma.

Mari Jungstedt escribe para que el lector "tenga ganas de pasar las páginas" y además de concentrarse en la tensión dramática aporta otros elementos, como una historia de amor, porque "aunque no sea necesario en un libro de crimen, sí es un reflejo del mundo en el que vivimos".

Hace tres años que dejó de trabajar en la televisión para dedicarse de lleno a la literatura, pero sus historias también están vivas en la pequeña pantalla desde que se emite en Alemania una serie basada en sus novelas, rodada en Gotland.

No interfiere en los guiones, porque "lo más importante" para ella es "escribir libros", aunque se muestra emocionada al decir que "es un sueño" ver que, además de a los lectores, el comisario Knutas se ha acercado ya a seis millones de telespectadores.


1 comentario:

Unknown dijo...

El boom que experimenta la novela policíaca en estos momentos muchos lo atribuyen al éxito de la trilogía de Stieg Larsong quien no vivió para verlo. De esta se han hecho ya dos películas, creo que una estaba aquí en el país en cartelera: "Los hombres que no amaban a las mujeres".